Francisco Velázquez de Cuéllar, fundador de Axon Partners Group, recuerda su paso por el MBA de la UPM

Francisco Velázquez de Cuéllar, de Ingeniero Aeronáutico, realizó el MBA en el curso 1997-1998, en la promoción número 5. 25 años después, charlamos con él para recordar su paso por el MBA.

Cuéntanos, ¿por qué te decidiste a hacer el máster con nosotros?

«Desde el principio de mi carrera como aeronáutico siempre tuve claro que tenía que complementar con estudios de empresa.»

Porque desde el principio de mi carrera como aeronáutico siempre tuve claro que tenía que complementar con estudios de empresa. Mi vocación siempre fue la de ser emprendedor y claramente esa parte empresarial necesitaba ese complemento.

Cuando fui a elegir MBA yo era muy joven, acababa de terminar la carrera. En ese momento el MBA de UPM tenía un convenio con el Colegio de Ingenieros Aeronáuticos y me propusieron darme una ayuda económica para cursarlo. Aprovecho para agradecer al Colegio de Ingenieros que apostasen por mi en ese momento. No lo dudé demasiado porque aparte de la ayuda económica, la UPM es un gran referente para mi y además el MBA me permitía trabajar mientras estudiaba con lo que todo cuadraba bastante bien.

¿Qué es lo que mejor recuerdas del programa?

«Es un año en el que no paré de aprender.»

Lo que aprendí. Era una esponja. Me gustaba todo. Desde la estrategia a los recursos humanos, el marketing, la macroeconomía y geopolítica, todo. Es un año en el que no paré de aprender. Además había buen ambiente en clase. El MBA de la UPM era relativamente reciente y entraba gente joven con ganas y de muy distintas disciplinas empresariales. Era agradable pasar el rato en clase con los compañeros.

¿Y el profesor o la materia que más le gustó?

Me gustaron muchos profesores. Recuerdo a Luciano Berrocal, que nos daba temas de geopolítica muy interesante. Recuerdo también unas sesiones que dieron unos ejecutivos de Lucent (ahora Alcatel creo) sobre cadena de suministro en el sector industrial que mezclaba conceptos de empresa con conceptos muy analíticos. En general tuvimos muy buenos profesores en todas las disciplinas.

Con la perspectiva que te da el haber hecho el máster hace tiempo, ¿de qué forma has podido aplicar lo que has aprendido en el máster?

He aplicado todo. Dos años después de empezar a trabajar dejé mi carrera de ingeniero para incorporarme a una consultora británica de estrategia en telecomunicaciones (Analysys Mason). Ese es el momento en que de verdad empecé a aplicar los conocimientos adquiridos porque estuve seis años en esa empresa trabajando en grandes proyectos de M&A del sector telecom en Europa, asesorando a reguladores y agencias gubernamentales en temas relacionados con tecnología y en definitiva aplicado mucho conocimiento tecno-económico que era precisamente para lo que me había formado. En esa empresa estuve hasta final de 2005 fecha en la que decidí emprender y fundar Axon Partners Group. Posteriormente, ya como empresario, y más en una empresa como Axon, la formación de un MBA se aplica en toda su integridad. Invertimos en empresas de toda índole (más de 60 empresas desde nuestra fundación), participamos en consejos, ayudamos a los empresarios etc. Pero es que en la propia Axon hay ya casi 100 empleados de muy alta cualificación entre socios, analistas, soporte y back office que cubren muchos servicios distintos y que hay que gestionar también. Es decir, aplico todo lo que vi en el MBA sin excepción, ya sea en mi propia empresa como en las empresas participadas.

«Aplico todo lo que vi en el MBA sin excepción, ya sea en mi propia empresa como en las empresas participadas.»

De qué forma crees que el máster te ha ayudado en tu progreso profesional / a lo largo de tu carrera hasta ahora?

Fue clave en mi carrera por tres razones:

• La primera porque me ayudó a entender bien el mundo de la empresa.
  
• La segunda, la más importante, porque suscitó en mi la curiosidad y la pasión que yo tenía por la estrategia empresarial y el emprendimiento en general.
  
• La tercera razón es de esas cosas que pasan que solo puedes dar gracias a Dios. Cuando fundé Axon conté inicialmente con el apoyo de la UPM que se sumó como socio institucional del proyecto (aunque después de la crisis de 2008 salió del mismo). Ese apoyo fue crucial porque en 2006 yo tenía 31 años y la única forma de captar recursos para invertir en venture capital tecnológico era tener cierto apoyo institucional. La UPM me dio ese apoyo. Pero la persona verdaderamente clave para lograrlo fue Alejandro Orero.

«Sin Alejandro Orero, y por tanto sin haber realizado el MBA, Axon no hubiese sido posible.»

Cuéntanos un poco pasa sobre esos inicios de tu empresa.

Cuando yo pensé en fundar Axon en 2005 quería poder convencer al rector de la UPM de que me apoyase en el proyecto, y fue Alejandro quién me ayudó a entablar las primeras conversaciones con D. Javier Uceda y especialmente D. Gonzalo Leon, que fueron los que creyeron en mi.

Un día de 2005 fui a ver a Alejandro para contarle el proyecto de Axon. Estuvimos en los despachos que tenía la administracion del MBA, en una mesa redonda. Ahí les expliqué lo que pretendía y el rol que la UPM podía tener en un proyecto de venture capital para emprendimientos tecnológicos. El concepto sonó bien y Alejandro fue a contárselo a Gonzalo León que fue quien lo apadrinó. Para la UPM era una forma de adelantarse a su tiempo, de participar en un vehículo privado de inversión en start ups. Pena que la crisis de 2008 frustró algo de todo eso. Pero ahí queda para la posteridad. En cualquier caso, sin Alejandro Orero, y por tanto sin haber realizado el MBA, Axon no hubiese sido posible.

El resultado por ahora ha sido bueno. Axon ha sido una historia bonita, gestionamos más de 700 millones de euros siendo una de las casas más grandes de VC del sur de Europa. Además, trabajamos dando asesoramiento en más de 40 países. La empresa cuenta con cerca de 90 empleados, 10 socios de carrera y desde el 28 de julio de 2022 cotiza en la bolsa de Madrid (ticker APG).

Sobre la trayectoria de Francisco Velázquez de Cuéllar

Ingeniero Aeronáutico, realizó el MBA mientras empezaba su trayectoria profesional en Construcciones Aeronáuticas (CASA) como ingeniero de estructuras en la sección espacial. En CASA trabajó 8 meses y pronto salió para irse a Hispasat dentro de la dirección general de programas, llevando los contratos de diseño y fabricación de las antenas y el sistema de control del satélite H1C. De ahí pasó a Analysys Mason, una consultora británica especializada en estrategia en el sector telecomunicaciones. Estuvo casi seis años en Analysys, y en 2006 fundó Axon Partners Group, empresa que se dedica a capital riesgo y asesoramiento en tecnología a nivel global.